Él hubiera sido feliz si ella hubiera escrito palabras de ternura y las hubiera envuelto en sobres de esperanza, y se las hubiera hecho llegar. Tal vez hubiera bastado con un "te echo de menos", o un "ojalá que estés bien". O quizá podría haber escrito: "estoy mal sin ti", y él hubiera recortado las uñas a la tristeza y hubiera podido sonreir pensando en ella. Pero no. Nada de esto ocurrió. En lugar de eso, ella escribió un sms: "púdrete". Y fue entonces cuando él empezó a descongelarse hasta que sólo quedó un charco de tristeza en la esquina donde se apostaba a esperarla cada tarde.
jueves, 29 de diciembre de 2011
PALABRAS
Él hubiera sido feliz si ella hubiera escrito palabras de ternura y las hubiera envuelto en sobres de esperanza, y se las hubiera hecho llegar. Tal vez hubiera bastado con un "te echo de menos", o un "ojalá que estés bien". O quizá podría haber escrito: "estoy mal sin ti", y él hubiera recortado las uñas a la tristeza y hubiera podido sonreir pensando en ella. Pero no. Nada de esto ocurrió. En lugar de eso, ella escribió un sms: "púdrete". Y fue entonces cuando él empezó a descongelarse hasta que sólo quedó un charco de tristeza en la esquina donde se apostaba a esperarla cada tarde.
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¡Precioso!!!
ResponderEliminarBuen micro, lleno de contenido y sorprendente. Ojalá que nunca nos quedemos en un charco de tristeza, ni dejemos a otros en él.
ResponderEliminarQue tengas un 2012 pleno de éxitos y creatividad.
Un abrazo muy fuerte.
Muchas gracias a las dos por los ánimos. Me alegro de veros por aquí. Mucha felicidad, mucha suerte y muchísima salud para el 2012 a las dos.
ResponderEliminarY un abrazo grandísimo.